jueves, 22 de julio de 2010

LA INVERSIÓN PRODUCTIVA

La década de 1970 fue una época de gran dinamismo para América Latina, el crecimiento promedio del PIB bordeo el 6% gracias al enorme impulso de la inversión aumento de capital, el cual estuvo cercano al 22% del producto. Los flujos de capital externo, en especial créditos ayudaron a que las economías de la región invirtieran recursos en grandes proyectos públicos.

La América Latina del nuevo milenio es distinta de las décadas de 1980 y 1990, ya que existen mayor preocupación por la sostenibilidad de las cuentas públicas, los resultados no han sido nada espectaculares, en los últimos cinco años el crecimiento del PIB apenas llego al 1.2%, entre los responsables del descenso se encuentra la caída de la inversión como porcentaje del producto, que bajo al 19% y resto más de un punto porcentual al crecimiento regional.

Las decisiones de inversión merecen estudiarse por varias razones importantes, las fluctuaciones de la inversión de las empresas juegan un papel central en la determinación del nivel de producto y empleo en el corto plazo.







Naturaleza de la Inversión

La inversión es aquella parte de la producción que se utiliza para mantener o aumentar el stock de capital en la economía, al aumentar el stock de capital el gasto de inversión hace crecer la capacidad productiva futura de la economía, existen diversas formas de inversión:

Inversión en activos fijos que mide lo que gastan las empresas en la planta (estructura física que ocupa una fábrica o una oficina comercial) y los equipos (maquinaria y equipo).

Inversión en estructuras residenciales que considera lo que se gasta tanto en mantener las viviendas existentes como producir viviendas nuevas.

Inversión en existencias o inventarios mide el cambio de la dotación de materias primas productos semiterminados y bienes terminados que todavía no se han vendido al comprador final durante cierto periodo.



Otras Formas de Inversión

Los bienes de consumo durable como automóviles, refrigeradores y lavadoras, representan servicios de consumo que subsistirán por muchos periodos, los tipos de capital que se han mencionado son de capital reproducible porque su stock puede aumentarse gracias a mayor producción. Los terrenos y los yacimientos mineros, son capital no reproducible, pues no es posible aumentarlos por la vía de producir más, los yacimientos mineros no solo son reproducibles sino también son agotables.

El deterioro de los recursos naturales debería entonces contarse como inversión negativa, ya que se produce la capacidad productiva futura de la economía, una fuerza de trabajo bien entrenada implica un tipo de capital humano, la capacidad de los trabajadores aumenta la capacidad productiva de la fuerza laboral.

La inversión bruta es el gasto total en bienes de capital, mientras la inversión neta es igual a la variación del stock de capital de un año a otro. La diferencia entre ambas es precisamente la depreciación del stock de capital, el monto en que el capital existente se gasta durante un año determinado.











Patrones de Inversión

El gasto en inversión es marchosísimo mas volátil que el gasto en consumo, el consumidor en general desea suavizar su consumo a través del tiempo contar con un patrón de consumo estable. La formación del capital fijo en Francia fue entre el 20 y 25% del PIB durante la mayor parte del mismo periodo, este coeficiente fluctuó entre el 15 y 20% en Estados Unidos y en el Reino Unido, que están entre los más bajos del mundo industrializado.

América Latina con excepción de Chile, la tasa de inversión es menor que la de los países desarrollados, no es extraño que en los últimos 40 años el crecimiento del ingreso por habitante de los Tigres Asiáticos fuera tres veces mayor que el de América Latina, hay diferencias como la calidad de las instituciones, el respeto a la ley y la orientación externa, casi la mitad de la brecha corresponden a las diferencias en la acumulación de capital entre ambas regiones.







Determinantes de la Inversión

Cuando en crecimiento se acelera, la inversión aumenta y cuando desacelera la inversión disminuye, una de las principales señales del estado futuro es precisamente el crecimiento actual de la producción, altas tasas de crecimiento del PIB por lo general se interpretan como un signo de prosperidad futura.

Otro factor central en las decisiones de inversión es la comparación entre el costo de capital que se relaciona estrechamente con la tasa de interés y la rentabilidad del proyecto, cuando la tasa de interés cae resulta conveniente invertir más porque el costo de financiar la inversión es menor.

Cuando una empresa se raciona el crédito, la inversión depende no solo de la tasa de interés y la rentabilidad del proyecto, sino del flujo de caja de la empresa, al cual se le llama racionamiento del crédito esto es cuando el gobierno establece un techo a la la tasa de interés, poniéndola por debajo del equilibrio de mercado y cuando las instituciones de crédito no logran evaluar con precisión los riesgos de prestar dinero a ciertos deudores.













Bibliografía

Larrain,B.,felipe,Macroeconomía,Person Educación,México,2004



viernes, 9 de julio de 2010

LA IMPORTANCIA DEL CONSUMO Y EL AHORRO


Las principales perspectivas sobre el futuro de la economía resultan primordiales para entender el comportamiento del principal componente del PIB, el consumo que es el destino principal de la producción, comprender los factores que determinan el consumo de una familia y de un país resulta fundamental para entender cómo funciona la economía.
El consumo es el destino de la mayor parte de la producción nacional, en consecuencia cuando una economía local se estanca o crece muy poco, una de las principales preguntas que las autoridades que administran las cuestiones económicas deben responder es como va a reactivar el consumo, las decisiones relacionadas con el consumo son la otra cara de las decisiones de ahorro.


La decisión entre Consumo y Ahorro

El análisis es la manera en que las familias determinan cuanto de su ingreso corriente va a ahorrar y cuando a consumir, las familias periódicamente disponen de ingresos laborales o financieros, además de que tienen una idea aproximada de los ingresos que podrían recibir a futuro.

La decisión entre consumo y ahorro no depende solo del ingreso y la riqueza actuales, sino de las expectativas futuras: por ello, se afirma que se trata de una decisión de carácter intertemporal. Las personas pueden endeudarse y consumir mas allá de su ingreso disponible durante algunos periodos, aunque a lo largo de toda su vida no deberían gastar más de lo que perciben.

Tras una sequía poco común que afecto a Estados Unidos en 1988, destruyendo gran parte de la cosecha de trigo en ese país, el precio del grano prácticamente se duplico en los mercados internacionales. La cosecha en la pampa fue buena ese año, por lo que el agricultor argentino disfruto de un aumento importante en sus ingresos cuando exporto su trigo.

Importante es que hay un patrón regular de ingreso durante la vida de las personas. Durante sus años productivos, sus ingresos alcanzan un máximo en la edad madura, pagan sus deudas contraídas con antelación y ahorran para cuando se jubilen.



La Restricciones de Liquidez y el Ahorro Precautorio

La restricción de liquidez se define como la incapacidad de algunos individuos de endeudarse considerando sus ingresos futuros, lo cual se debe a que quienes otorgan el crédito suponen que esos individuos enfrentaran dificultades para pagar los préstamos y no cuentan con las garantías adecuadas que los respalden.

Los mercados financieros por lo general prestan contra una garantía, no solo contra la promesa de que un deudor financiara el servicio de un crédito con sus ingresos laborales futuros, otro aspecto que debe considerarse, es el hecho de que el consumo depende de las expectativas de ingreso venidero, por lo tanto a mayor incertidumbre sobre el futuro, las personas ahorraran mas.

La experiencia chilena de los últimos 40 años sirve para ilustrar los dos nuevos elementos. La ejecución de una serie de reformas financieras a mediamos de la década de 1980, posibilito la disminución de tales restricciones y la profundización financiera, la recesión de finales de 1998 y de gran parte de 1999 llevo a una abrupta caída en el consumo. Las personas vieron caer su ingreso disponible, otras perdieron su empleo y en general las expectativas se deterioraron.

El pobre desempeño del consumo ocurrió a pesar de las constantes reducciones en la tasa de interés por parte del Banco Central, que se destinaron a fortalecer el consumo y la inversión.


El Ahorro Nacional

El ahorro agregado depende de la distribución por edades de la población y del crecimiento del ingreso, pues ambos factores ayudan a determinar la riqueza de los ahorrantes jóvenes, en comparación con los des ahorrantes mayores, cuanto mayor sea la proporción de individuos en edad de trabajar respecto de los más viejos o los muy jóvenes mayor será la tasa de ahorro de un país.

La tasa de ahorro y el consumo es ambiguo en términos teóricos, en tanto que los resultados empíricos no son concluyentes, una tasa de interés mayor resulta un incentivo para aumentar el ahorro, dado el nivel de ingreso se conoce como efecto sustitución, si la familia es acreedora neta tiene más activos que pasivos financieros, el incremento de la tasa de interés también aumenta el ingreso futuro, por lo que tiende a incrementarse el consumo y a reducirse el ahorro efecto de ingreso.

La tasa de ahorro difiere en forma significativa entre países, las economías de Tailandia, Indonesia y Japón son una clase aparte con las tasas de ahorro que superan el 25% del PIB. Las economías latinoamericanas, las chilenas exhibe la tasa más alta, mientras en el otro extremo la boliviana apenas ahorra el 7% del PIB.
Una regularidad empírica del ahorro es que las economías que crecen más rápido tienden a mostrar tasas de ahorro mayores que aquellas que lo hacen más lento.




Bibliografia

Larrain, B. Felipe, Macroeconomía, Person Educación, México, 2004